Ya no Estoy Aquí (En Español)

Ya no Estoy Aqui

Haga ckuc aquí y lea la reseña original de “Ya no Estoy Aqui”.
Sinopsis
: En “Ya no estoy aquí” Ulises, líder de un grupo enamorado de la cumbia, se ve obligado a huir de México para salvar su vida luego de un malentendido con una pandilla local.
Dirección: Fernando Frias de La Parra
Título original: Ya no Estoy Aquí (2019)
Género: Drama
Duración: 1h y 52min
País: México

Ya no Estoy Aquí

Los Negros que ya Somos [bellos] – Latinoamerica en Movimiento

Hay un estilo de música que se llama cumbia. Este estilo nació en la región norte de Colombia, pero se ha expandido al resto de América Latina. Los países de ese continente lo adoptan como uno de sus ritmos más importantes, a excepción de Brasil, en el que el ritmo viene viniendo con más fuerza después de las fiestas producidas por inmigrantes de otros países latinos. Pero, no es solo un ritmo musical del que estamos hablando. En “Ya no Estoy Aquí”, distribuida por Netflix, el director Fernando Frías de La Parra sabe cómo usar bien estas variadas prendas de cumbia.

Hoy, podemos entender la cumbia como una forma de expresarse culturalmente, no solo con el baile que la acompaña, sino también con la ropa, la forma de caminar, la jerga, el cabello cortado y pintado, los tatuajes, entre otros. Todas estas características estéticas que definen quién pertenece a un grupo u otro.

La película comienza con un Ulises (qué nombre tan significativo) que sale de Monterrey, una ciudad mexicana en el norte del país, para un viaje a los Estados Unidos. Luego presenta la vida de este mexicano junto a otros sudamericanos que, como él, trabajan en la construcción. Sin hablar inglés y sin identificarse con compañeros de trabajo (¡como nuestro continente es realmente múltiple!), El joven empieza a extrañar la vida en Monterrey.

En “Ya no Estoy Aquí” la cuestión de la inmigración de la población latina a Estados Unidos es tomada con mucho cuidado por el cineasta, mostrando una serie de cuerpos que terminarán en la megalópolis de Nueva York. Sin estereotipar estos cuerpos y sus motivos, Frías muestra lo difícil que puede ser el camino, como el de Ulises.

La película pasó por el Festival de Tribeca provocando cierta reacción y fue premiada como el mejor largometraje mexicano en el Festival de Cine de Morelia, que reúne películas de diferentes directores del país. Creo que esta recepción positiva proviene en gran parte de la conducta de Frías. El actor Juan Daniel García Treviño, intérprete del protagonista Ulises, tiene en “Ya no Estoy Aquí” su primer papel en el cine. Esta inocencia de quienes aún no se han corrompido por los patrones cinematográficos de comunicación frente a las cámaras (y lo digo en el buen sentido) hace que Treviño destaque en un híbrido entre cinematográfico y autoactivo. Como los demás miembros de los grupos.

En el escenario, la cumbia con la que se conecta el grupo de Ulises es la cumbia más lenta de Kolombiana, como diferencia entre encanto y funk. Sin embargo, existen varios tipos dentro de este género musical. En una de las secuencias más realistas de la película, nos enteramos de que hay “vallenatas más lentas”, “sonolores más lentos”, más kolombianos, incluso unas de Perú y Argentina ”. Un caballero, vendedor de MP3 en un popular quiosco, da una lección sobre música latinoamericana. Uno de los puntos fuertes de la película, así como en la reciente “Ema” (2020) de Pablo Larraín, es la música.

Es la música que lidera el viaje de un Ulises admirado como líder de uno de los grupos locales en Monterrey. Un hombre que, al llegar a Nueva York, se da cuenta de que no es más que un engranaje más de la máquina, pero siempre lo estamos, en mayor o menor medida. Allí ya no es carnal (jerga mexicana para saludar a un amigo). Ya no es Ulises. Es solo un cuerpo extraño, con su cabello teñido y ropa de villano, una mezcla muy particular entre la moda de los raperos, sin embargo, más colorida y, que invita a la latinidad.

El protagonista pierde sus colores en Estados Unidos, por mucho que tenga fiestas privadas y encuentre un interés romántico. Cuando miramos las trágicas motivaciones del viaje de Ulises a Nueva York, vemos su realidad en un país donde su efímera es evidente.

Solo un cuerpo pasajero.

Así, su cuerpo y el de Lin (su interés romántico) están más cerca por la diferencia en relación a la cultura en la que viven que por las similitudes entre sus culturas ancestrales.

El joven usa su exotismo para ganar dinero, que es la única forma de ser visto. Como todavía estamos tan tarde en esta relación entre el otro y el lugar…

Encuentra algún tipo de afecto en lugares y cuerpos que ya se consideran forasteros en la sociedad estadounidense. Todavía le falta la música. Todo el recorrido de este Ulises de “Ya no Estoy Aquí” pasa por el acercamiento con la música y su identidad central.

El final de su viaje no se revelará aquí, pero está entrelazado con el de tantos jóvenes latinos que no tienen ingresos fijos ni hogar.

Sin embargo, el joven se refugia en la música.

Nota: quédese hasta el final de los créditos.

Ver el Trailer:

Em constante construção e desconstrução Antropóloga, Fotógrafa e Mestre em Filosofia - Estética/Cinema. Doutoranda no Departamento de Ciências Sociais da Universidade do Estado do Rio de Janeiro (UERJ) com coorientação pela Universidad Nacional de San Martin(Buenos Aires). Doutoranda em Cinema pela Universidade Federal Fluminense (UFF). Além disso, é Pesquisadora de Cinema e Artes latino-americanas.

Categories: Tags:

Deixe um comentário

O seu endereço de e-mail não será publicado. Campos obrigatórios são marcados com *